La agricultura que viene

La agricultura ha saltado a la palestra en las últimas semanas, poniendo de manifiesto su difícil situación actual. Sin embargo, también tiene amenazas en el futuro: para el año 2050 la demanda de cultivos para alimentación humana y animal se duplicará. Para conseguirlo, tendrá que hacer frente al cambio climático, degradación de las tierras, escasez de agua, etc…

La tecnología se convierte en su principal ayuda y ya se están viendo los primeros avances, algunos claros y otros en fase de experimentación. Estos son los principales cambios tecnológicos que se están produciendo:

- Cultivos en entornos protegidos

Se están construyendo invernaderos de dimensiones muy superiores a las habituales donde se siembran hortalizas. Todo está robotizado: la siembra, riego, recolección, etc…, contando con multitud de sensores que permiten controlar todo el entorno del cultivo. En realidad, supone tener productos ecológicos 365 días al año, ya que no hay plagas y las condiciones ambientales se mantienen en función a las necesidades del cultivo. Permitirá producir alimentos en cualquier lugar del mundo, ya que ni el suelo, ni el clima serán determinantes.

- Drones y satélites

Permiten obtener información sobre las necesidades hídricas del cultivo, plagas, estados de las cosechas o incluso llevar a cabo fumigaciones de precisión cuando las circunstancias impiden hacerlo por los medios habituales.

- Sensores

Muchos agricultores cuentan ya con un sistema de sensores en sus cultivos que les permiten conocer la temperatura, humedad, carencias de elementos, plagas, etc..

- Big data

Toda la información obtenida de los cultivos y su entorno constituye una base de datos que, convenientemente analizada,proporciona una información clave para conocer las características de cada suelo y cómo gestionar el cultivo que se decida plantar.

Incluso hay empresas ya que disponen de modelos predictivos sobre la producción por ha., calibres, grados de azúcar, etc…que se esperan recolectar en las próximas semanas.

- Robotización

No se trata sólo de la mecanización que se está llevando a cabo en el procesado de los productos agrícolas, sino de tareas del campo.

Hay ya algunos ejemplos como el injerto de plántulas o la recolección y confección de ramos de tomate en el invernadero.

Se están realizando pruebas para obtener un tractor autónomo, que utilizando la información de sensores, drones, etc…, permita realizar tratamientos y abonados particularizados a cada zona de la parcela. Hay empresas que ya cuentan con este sistema, pero utilizando conductores.

- Sistemas de riego eficientes

Hay sistemas que controlan el riego mediante modelos de evapotranspiración o utilizando dispositivos acoplados a los pivots con sensores que avisan cuando falla, la cantidad de agua que emite, la presión, temperatura, etc…

- Biotecnología

Se están descifrandolos genomas de los productos agrícolas, lo que permite potenciar o reducir algunas de sus características, como puede ser el grosor de su piel, el sabor, la fertilidad, etc….

Otra línea de actuación consiste en la fitogenética, mediante la cual se están mejorando los cultivos para hacerlos más resistentes, adaptables y productivos, incluso en las circunstancias más adversas. Todos los avances citados anteriormente van buscando, directa o indirectamente, el aumentar las producciones por hectárea, la productividad y la reducción de costes, así como satisfacer mejor las necesidades de los consumidores.

Los problemas que tiene el campo hoy en día son graves, pero no tenemos que olvidar los retos que hay en el horizonte y que lo transformarán significativamente. Un ojo en nuestro próximo paso y otro en el camino. En un próximo artículo trataremosla situación delsector agrícola, que aunqueparezca extraño, presenta muchas oportunidades.